Un genocida bienvenido en Qatar

por Rubén Kaplan
Al Bashir, actual presidente de Sudán, dictador y asesino sobre el que pesa un pedido de detención solicitado por la Corte Penal Internacional, que lo acusa por crímenes de guerra y de lesa humanidad cometidos en la región occidental de Sudán, Darfur, asistió con impunidad y desparpajo a la II Cumbre de Presidentes de América del Sur y los países árabes (ASPA) que se celebró en Doha, la capital del emirato de Qatar.

El fiscal general de la Corte Penal Internacional, el argentino Luis Moreno Ocampo, consideraba con cierto lirismo, que el plan de viaje de Al Bashir, era una oportunidad para arrestarlo. “Tan pronto entre en el espacio aéreo internacional, podrá ser detenido” “Al igual que Slobodan Milosevic o Charles Taylor, el destino de Al Bashir es ser detenido para ser juzgado”. Cabe recordar que Taylor, ex presidente de Liberia, y quien fuera uno de los caudillos más temidos de África, afronta cargos por asesinatos, secuestros, mutilaciones y reclutamiento de niños soldados en un Tribunal Especial de Naciones Unidas.

Con su presencia en la cumbre, Al Bashir, en un claro desafío, se burla de los esfuerzos de la comunidad internacional, para que comparezca ante la CPI por la guerra larvada que vive Sudán y que ha generado, según informes de la ONU, 300.000 muertos en Darfur y más de 2.700.000 refugiados.

El día lunes 30 de marzo, el secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki Moon, quien sorpresivamente acudió al evento de Doha, criticó en su discurso a Sudán por expulsar a las agencias de asistencia en Darfur. En la misma sintonía, Estados Unidos, Francia y Gran Bretaña, insisten en que se ejecute la orden de detención y se proteja a los civiles y ONGs extranjeras en Darfur.

Los 22 países árabes llegaron a la reunión muy divididos por sus respectivas posiciones ante la ofensiva militar israelí en Gaza entre el 27 de diciembre y el 18 de enero. Siria y Qatar, apoyados por Irán, defendieron a los terroristas del Hamas, que controlan Gaza, mientras Arabia Saudita y Egipto respaldaron al presidente palestino Mahmud Abbas, jefe de Al Fatah, que gobierna en Cisjordania.

Las tradicionales disputas entre los países que conforman la Liga Árabe, que tuvo la deserción de los mandatarios de Egipto, Argelia, Irak, Marruecos y Omán, se disiparon sólo al efecto de ejercer la defensa monolítica y corporativa del criminal Al Bashir y del proverbial ataque a Israel. “Expresamos firmemente nuestra solidaridad con Sudán y nuestro rechazo a las decisiones de la Corte Penal Internacional contra el presidente Bashir” afirmó el secretario general de la Liga Árabe, Amro Musa, en la declaración final leída durante la clausura del ASPA. En el comunicado oficial, los líderes condenaron la reciente “brutal agresión” israelí contra la Franja de Gaza y prometieron resolver de “una manera constructiva” las diferencias que separan a los países árabes. Ese cometido, no parece una empresa fácil.

Fuera del consenso logrado en el amparo de Omar Al Bashir y la condena a Israel, se apreciaron grietas y choques verbales entre los componentes de la Liga Árabe. Abdalá II rey de Jordania, considerado moderado por Occidente, acusó a Irán, sin citarlo por su nombre, de encender el caos y la división en la región. «La injerencia extranjera permanente es el principal motivo de que continúe la división de los palestinos», afirmó.

Por su parte, el presidente sirio Bashar Al Assad, aliado del régimen persa de Ahmadinejad, mostrándose beligerante, declaró que el cambio de gobierno en el Estado hebreo, es irrelevante. “Tanto a la derecha, el centro y la izquierda, sólo les apetece la tierra de los árabes. Sostuvo asimismo, que estos, “carecen de verdaderos interlocutores en el proceso de paz” con Israel.

Otro breve disertante, fue el vitalicio dictador de Libia, Muammar el Gadafi, quien lleva 40 años en el poder. Al tomar la palabra, se presentó como el Rey de Reyes de África, Imán de los musulmanes y Decano de los dirigentes árabes. Luciendo anteojos negros, en un estado que invita a examinar las sustancias que inhala en su narguile, protagonizó un altercado al atacar verbalmente al rey saudí Abdullah y acusarlo de mentiroso y de tener vínculos con el Reino Unido y Estados Unidos. A continuación, abandonó la sesión, para retornar más tarde a la sala y decir dirigiéndose al rey de Arabia Saudita en tono más conciliador “: “Por el bien de la nación (árabe) considero que el problema personal entre usted y yo está cerrado y estoy dispuesto a visitarle y a recibir su visita”, arrancando con sus palabras, el compasivo aplauso de los asistentes.

También entre los representantes suramericanos, se advirtieron fisuras. El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, grotesco remedo del dictador Fidel Castro, hizo una enfática apología del sanguinario Al Bashir y lo invitó a que visite el país caribeño.

En declaraciones a la prensa, previas a la cumbre, espetó: “¿Por qué no ordenan la detención de (George) Bush? ¿Por qué no ordenan la detención del presidente israelí? Lo hacen porque es un país africano y del tercer mundo. Es un horror jurídico y una falta de respeto al tercer mundo”. El desafortunado parangón entre el presidente de Israel Shimon Peres, respetado mundialmente y el asesino Omar Al Sharif, sólo puede concebirse, emanado del ponzoñoso veneno antisemita del bolivariano. Chávez, en su afán de mostrarse como enconado enemigo de los Estados Unidos, no vaciló en criticar a la mandataria chilena Michelle Bachelet, que ostenta el cargo de presidente de turno de la Unión de Naciones Americanas (UNASUR).

«Creo que no le hace nada bien a la unidad de Sudamérica cuando la presidenta de Chile convoca una reunión en Santiago con el vicepresidente de Estados Unidos y el primer ministro británico, representantes de los imperios. No entiendo nada», añadió.

«Creo que pone en peligro la unión sudamericana. Así lo digo porque un revolucionario, y yo lo soy, no debe callar y tiene que decir la verdad y eso es parte de la verdad».

El aliado de Chávez, el presidente boliviano Evo Morales, llevó como ambiciosa propuesta la sustitución del capitalismo, al cual calificó de modelo egoísta y derrochador, responsable de colocar a mil millones de personas en la extrema pobreza y de un cambio climático capaz de extinguir a la especie humana.

Por su parte, el mandatario brasileño Luis Inácio Lula da Silva, señaló este martes que las naciones árabes y suramericanas deben mantener un mensaje «fuerte y claro» en la celebración de la Cumbre del Grupo de los 20 (G-20) de este jueves en Londres: la defensa del papel del Estado frente a la crisis global.

Ninguno de los integrantes de la II Cumbre de Presidentes, que reiteradamente condenaron la construcción del Muro de Defensa en Israel, para reducir el terrorismo, se animó a esbozar una crítica al presidente brasilero, por la instalación de un muro de separación que se erigirá en la frontera con Paraguay que tendrá 1,5 kilómetros de longitud y 3 metros de altura, rodeando la obra del Puente de la Amistad, perpendicular al río Paraná, para evitar el contrabando a su país. Tampoco expresaron su rechazo al levantamiento de una valla en el mismísimo Río de Janeiro, para impedir el ingreso a la ciudad balnearia, a los habitantes de las favelas.

Quien sorprendió en la cumbre, fue la presidente argentina, Cristina Kirchner, a quienes los medios de su país criticaron por no aparecer en la foto junto al resto de los mandatarios. La prensa conjeturó que se trató de otra de sus recurrentes transgresiones al protocolo.

Sin embargo, en un gesto que la honra, Cristina Kirchner, quien se declara pertinaz defensora de los derechos humanos, se retiró del plenario de sesiones de la II Cumbre de Jefes de Estado de Países Árabes y de Latinoamérica en el momento que iba a hacer uso de la palabra el presidente de Sudán, al Bashir.

El reclamo justificado de la presidente Kirchner por la soberanía de las Islas Malvinas, quedó opacado por la analogía de las mismas con las reivindicaciones palestinas.

Por último, al pronunciar su discurso, el criminal Omar Al Bashir, atacó a las ONGs acusándolas de espiar para la CPI y minimizó el impacto humanitario de su retirada del territorio. Como corolario y para suscitar la inmediata adhesión de los países árabes, Bashir imputó al Estado hebreo, respaldar a los rebeldes de Darfur.

Acusar a Israel, que entregó ayuda financiera y médica a los damnificados por el genocidio en Sudán, es tan disparatado, como si le atribuyesen la responsabilidad por la invasión de mosquitos que está provocando una epidemia de dengue en Argentina.

Maradona, Ahmadinejad y Chávez

por Rubén Kaplan en El Reloj

El afamado, ex futbolista, Diego Maradona nos tiene acostumbrados a las diatribas y a provocadoras declaraciones. Cierto periodismo coadyuva a ese despropósito al consultarlo para que opine de todo tema trascendente cual si fuera un oráculo. Su indudable calidad futbolística lo erigió en su momento en uno de los mejores jugadores del mundo. Esos indiscutidos atributos no son suficientes para que sus declaraciones abarquen todos los tópicos imaginables, restaría que disertase sobre física cuántica con total desparpajo.

Su vida personal y sus variadas adicciones no fueron ni son un ejemplo de vida. Siempre estuvo cerca del calor del poder de turno. Con su consentimiento fue y es usado y a la vez él obtuvo y tiene beneficio de sus vaivenes y giros.

Maradona, en el 2007, tras el encuentro de un partido de Show- Bol que había disputado la Selección Argentina contra Brasil, recibió en el vestuario del Luna Park al encargado de negocios de la República de Irán Moshen Baharvand, que llegó acompañado por una periodista argentina que trabaja para el país islamita y otro colaborador.


Con total desenfado, los visitantes invitaron a Maradona a conocer Irán. Encontraron, para su satisfacción, la respuesta que tenían garantizada de antemano. El para muchos aún ídolo, manifestó que ya había conocido a Fidel y a Chávez y le restaba conocer a Ahmadinejad, a quien le envió anticipadamente su camiseta como ofrenda de amistad. «Estoy con los iraníes de todo corazón, de verdad lo digo. Lo digo porque lo siento: Estoy con el pueblo de Irán».

Es de presumir que el opinante consuetudinario que es Maradona conocía que Irán es el país sindicado de cometer el más atroz atentado terrorista que sufrió la Argentina, la voladura de la Asociación Mutual Israelita Argentina.

Cinco ex funcionarios iraníes tienen pedido de captura internacional librado por la Justicia Argentina (refrendados por la Interpol) acusados de ser los planificadores del abominable hecho recién mencionado. Actualmente, integran el gobierno del país que anhela conocer Diego, cobijados por el vesánico Ahmadinejad, quien declara públicamente la intención de hacer desaparecer a Israel del mapa.

En el caso que Maradona viajase a Irán le convendría imbuirse de algunos de los aspectos de la Sharía. En ella están contempladas severas penas a transgresiones como el adulterio y beber alcohol. El consumo de drogas está casigado con la muerte. Las ofensas sexuales conllevan una pena de lapidación o azotes. En caso que viaje con sus hijas reconocidas, ellas podrán atestiguar el grado de sumisión y desprecio del que son objetos las mujeres iraníes.

Luego del gran revuelo que causaron las declaraciones de Maradona, los miembros de la Agrupación Familiares y Amigos de las Víctimas del Atentado a la AMIA intentaron infructuosamente hablar con Diego, acerca de su manifiesta intención de viajar a Teherán para conocer a Ahmadinejad.

A través de su ex esposa y no directamente, Maradona comunicó que «respetaba a todo el mundo» y recordó en una evocación digna de Zelig, el personaje de Woody Allen, su viaje a Israel y su visita al Muro de los Lamentos. Presuntamente, también habría afirmado que «nunca se metía en política».

Diego Armando Maradona, cabe recordar, fue contratado para dar el puntapié inicial de la Copa América que se disputó en el 2007 en Venezuela a un costo de mil millones de dólares, luego de acordar sus elevados y discutidos honorarios. Hace unos días, Maradona, actual técnico de La Selección Nacional del Fútbol Argentino, desvirtuando su presencia en el

Sudamericano Sub-20 «Copa Juventud de América» Venezuela 2009, en una entrevista con la televisión venezolana expresó su apoyo a la reelección indefinida de Hugo Chávez, a quien elogió profusamente. El dictador caribeño, cínicamente, fiel a su estilo, atribuyó a la oligarquía el execrable atentado antisemita perpetrado por 15 forajidos armados en la noche del 30 de enero de 2009 contra La Sinagoga Tiferet Israel, que funciona en la sede de la Asociación Israelita de Venezuela en la urbanización Maripérez, tratando con esa infame acusación, deslindar su clara responsabilidad en el deplorable hecho.

El Pelusa, apodo con el que se conocía a Diego Armando Maradona en sus comienzos en Villa Fiorito, es muy proclive a los tatuajes.

El millonario ex jugador de fútbol, tiene tatuado en su hombro a Ernesto Guevara, el mítico Che, guerrillero argentino, paradigma de la izquierda, otro tatuaje, expresando su admiración al tirano Fidel Castro en un muslo. Ahora anuncia que tatuará en su piel al despreciable dictador Hugo Chávez. Como Maradona tiene previsto, en su ya lacerado cuerpo, estampar también a sus hijas; por la segura falta de espacio, a modo de sugerencia, sus asentaderas serían un magnifico lugar para lucir la imagen del bolivariano

Chávez y su adhesión al terrorismo del Hamas

El siguiente artículo fue publicado en http://www.elreloj.com el 8 de Enero a las 10:34, cada semana se renuevan artículos muy interesantes en la sección «Opiniones» de la mencionada página la cual he tomado como fuente entre otras muy confiables.
ארי השומר

por Rubén Kaplan

Con la ominosa expulsión del embajador de Israel Shlomo Cohen y su personal diplomático acreditado en Venezuela, el simiesco y proclive a la verborragia (benévolo eufemismo de charlatán) Hugo Rafael Chávez Frías ratificó su compromiso con los grupos terroristas.

El mandatario venezolano, denunciado por centenares de escritores, artistas, profesores e investigadores de su país y sudamericanos por evidenciar signos ignominiosos de racismo antisemita, tuvo como uno de sus mentores e ideólogos predilectos al fallecido sociólogo argentino Norberto Ceresole, notorio antisemita, cuya obra ha sido profusamente difundida entre los islamistas radicales, partidarios de la propagación internacional del terror. Ceresole, quien fuera dirigente del Ejército Revolucionario del Pueblo, movimiento terrorista argentino que junto a Montoneros, con su accionar sedicioso, generaron la feroz respuesta de la dictadura militar argentina, aquella que en lugar de juzgar mediante la ley a los responsables de atentados subversivos, como hizo Italia con Las Brigadas Rojas, optó por el asesinato y desaparición forzada de miles de sus integrantes, lo que constituyó una clara forma de terrorismo de Estado.

Chávez, grotesco remedo del dictador cubano Fidel Castro, es un antisemita y populista que coquetea con la violencia revolucionaria. Golpista, corrupto y demagogo, busca afanosamente perpetuarse en el poder en Venezuela, valiéndose de todos los medios a su alcance.

Está comprobado que el grupo terrorista chiíta Hezbollah junto a La Guardia Revolucionaria de Irán, país que lo financia y arma, han designado a Caracas como base de sus operaciones para expandir la Jihad en Sudamérica. Hugo Chávez invitó a «misioneros» chiítas para convertir a los Guajiros y otros indígenas de la Amazona venezolana , al Islam. La tribu Wayuu ha devenido musulmana, sus mujeres se ponen el velo, mientras que los hombres se adiestran en el uso de fusiles Kalashnikov. También se hacen fotografiar con cinturones cargados de explosivos, emulando a los fanáticos suicidas, para regocijo de Ahmadinejad y otros grupos terroristas del Medio Oriente.

Irán, que también subvenciona con millones de dólares mensuales al Hamas aprovecha la distracción de Occidente para proseguir con su indeclinable intención de obtener armamento nuclear.

El enfrentamiento entre Israel y los terroristas del Hamas, ocupa un desmesurado espacio en la media internacional. Como escribiera el eximio abogado judío y profesor de leyes de Harvard Alan Dershowitz «Muy simplemente, Occidente siente fascinación y preocupación por la historia de Israel, una curiosidad acerca de él, una atracción e incluso una aversión hacia él que no guarda ninguna proporción con las dimensiones de la nación. Asimismo, Israel tiene una extraña capacidad de introducirse en las noticias como ningún otro país de cuatro millones de habitantes» (actualmente siete millones)

La mayor parte de la prensa de los distintos países del hemisferio tiene una actitud crítica con Israel y magnánima con el Hamas. No le perdonan al Estado hebreo el derecho a defender a su país de los miles de cohetes y misiles que cotidianamente lanzan los terroristas a su población civil desde hace ocho años. Ni siquiera el hecho que Israel se haya retirado de Gaza hace tres años para coadyuvar a la paz en la región y que el Hamas decidiera concluir unilateralmente la tregua de seis meses que había expirado, intensificando los ataques al sur de Israel, merece la consideración de los medios.

Claramente tendenciosos y parciales, carentes de objetividad , muchos medios de difusión se regodean exhibiendo desgarradoras imágenes de las víctimas del ejército israelí, la mayoría niños. Pocos denuncian que los terroristas se parapetan y usan como escudos a la población civil, en una clara demostración de desprecio por la vida de su propia gente.

En el día de ayer, la opinión pública se estremeció con la noticia que Israel había bombardeado a una escuela perteneciente a la UNWRA, el organismo de las Naciones Unidas para los refugiados palestinos en el campamento de Jebalia en Gaza. Por el incidente el Tzahal fue denunciado como ejército nazi e Israel como genocida.

Hoy la agencia de noticias internacional Associated Press confirmó la versión del Ejército de Defensa de Israel que afirmaba que desde la escuela atacada disparaban terroristas del Hamas. AP agregó que entre los muertos se encuentran dos conocidos terroristas, los hermanos Imad Abu Askar y Hasan Abu Askar. El informe agrega que dos palestinos del barrio confirmaron lo aseverado por Israel, diciendo que un grupo de terroristas disparó morteros desde la calle de la escuela y luego escaparon entre la multitud de gente. Los palestinos manifestaron que quieren mantener el anonimato en virtud que temen por sus vidas. El temor se encuentra plenamente justificado. Suman decenas los palestinos ejecutados por el Hamas en la vía pública, por la presunción de colaborar con Israel. Otros sospechosos tuvieron mejor suerte y sólo recibieron disparos en sus rodillas y aplastadas sus manos, en una interpretación moderada de la ley de la Sharia que rige en el territorio de Gaza.

A raíz de las noticias difundidas por la prensa, las principales capitales del mundo fueron escenario de nutridas manifestaciones, la mayoría a favor del Hamas y contra Israel. Musulmanes en Europa acompañados por la extrema izquierda, cantaban consignas antiisraelíes y antijudías, en una evidente confirmación que el viejo antisemitismo, está actualmente enmascarado como antisionismo.

En Argentina hubo un acto organizado por el piquetero oficialista Luis D’Elía, conocido por haber copado una comisaría y haber protagonizado agresiones e incidentes sin penalización y premiado con un cargo público. A la marcha, que lo tuvo como principal orador, concurrieron representantes musulmanes, organizaciones de izquierda, el partido comunista y las desprestigiadas Madres de Plaza de Mayo, otrora respetadas por la sociedad. En la manifestación se divisaban carteles con alusiones a los isrelíes como nazis y otros con la fotografía del líder del movimiento terrorista Hezbollah, el jeque Hassan Nasrallah.

D’Elía, de entrañable amistad con Chávez y Ahmadinejad al que visitó en Irán para expresarle su apoyo, a pesar de recaer sobre el país islámico la acusación de la Justicia argentina, de ser el responsable del atentado a la Asociación Mutual Israelita Argentina el 18 de julio de 1994 y que cobró la vida de 86 personas, denunció desde el palco al Estado de Israel, al que llamó terrorista y perpetrador de masacres a escuelas palestinas, que provocaron la muerte de cientos de alumnos, maestros y civiles. Que atacó 30 ambulancias. Afirmó que 120.000 israelíes marcharon en Tel Aviv para denunciar la masacre de su gobierno. Como en pocas oportunidades la «Operación Plomo Fundido» tuvo un respaldo unánime y consenso entre los ciudadanos de Israel. La mendacidad de D’Elía al mejor estilo Goebbels, repugna.

Pareciera que la colosal campaña de distorsión, llegó hasta el Vaticano.

Imprevistamente, al grupo terrorista Hamas, le surgió un inesperado defensor. El cardenal Renato Martino, presidente del Pontificio Consejo para la Justicia y la Paz del Vaticano, formuló unas polémicas declaraciones en una entrevista concedida al diario italiano en Internet Il Sussidiario.net : «Poblaciones indefensas son siempre las que pagan. Observen las condiciones en Gaza; más y más, rememoran a un gran campo de concentración».

Al cardenal Martino, antiguo nuncio ante la ONU, que desde 2002 preside Iustitia et Pax y desde la llegada del Papa Benedicto XVI, la Pastoral de los Inmigrantes, cabe preguntarle por su desafortunada comparación, si en los campos de concentración, los prisioneros tenían armas para atacar , podían defender sus vidas o gozaban de la mínima libertad.

Martino es conocido por haber sido la voz más punzante en el Vaticano en contra del ataque estadounidense a Irak y por imprudentes declaraciones amistosas acerca de Fidel Castro. Por estas razones y por otras, como la propuesta de introducir la hora de religión islámica en las escuelas, que provocó anatemas por parte del periodista italiano y licenciado en Ciencias Políticas Ernesto Galli Della Loggia y el filósofo y político también italiano Marcello Pera, que también fue presidente del Senado Italiano del 2001 al 2006, fue que lo etiquetaron como el «Cardenal Anti- Ratzinger».

Hugo Chávez, que aspira a ser presidente vitalicio de Venezuela, pretende llevar a los tribunales internacionales a las autoridades israelíes y a George W. Bush, presidente de los Estados Unidos, por los «crímenes que están cometiendo contra el pueblo palestino».

En agosto del 2008, Rusia, uno de los aliados de Venezuela, atacó a Georgia y la acción militar contra el pequeño país del Cáucaso, provocó la muerte de 1500 civiles. El mamarracho Chávez, no expresó su condena con la teatralidad que lo caracteriza. Probablemente el mismo deba ser juzgado por triangular con Irán y Siria armamento para los terroristas palestinos.

El odio visceral de Chávez hacia Israel, quedó patentizado cuando en medio de un conflicto en donde apoyaba a la guerrilla de las FARC contra Colombia, enrostró al país vecino, ser el Israel de la región.

Venezuela es un socio privilegiado de la República Islámica de Irán, que a través de su presidente Ahmoud Ahmadinejad, amenazó en 30 oportunidades con borrar del mapa a Israel. Su influencia en Latinoamérica se extiende a Ecuador y Bolivia, que no retiran sus embajadores en Israel, por la sencilla razón que ni los tienen. El país del altiplano, anunció la instalación de un canal de televisión de Irán, quedando en evidencia el avance del Islam en el continente.

Venezuela compró bonos de la Argentina y cobró al país hermano, tasas de interés que superan por escándalo las que pagaba éste al vilipendiado Fondo Monetario Internacional.

La presidente de la Argentina, Cristina Kirchner, por instancias del Congreso Judío Latinoamericano y Mundial, organizó el año pasado una reunión entre los dirigentes de las entidades judías y Chávez, con el propósito de lograr un acercamiento entre las partes. El cónclave fue rechazado por la comunidad judía de Venezuela que afirmaba que Chávez era antisemita y que la reunión era funcional a sus intereses políticos, en época electoral. Una extrema ingenuidad o la posibilidad de hacer negocios, llevaron a los representantes del CJM a reunirse con Chávez.

El hecho de declarar el presidente venezolano al embajador de Israel en Caracas, persona no grata y dándole un plazo perentorio de 72 horas para que abandone su país, hace sopesar a Israel, romper relaciones diplomáticas con la Venezuela de Hugo Chávez, quien conminó a los 15.000 judíos que viven en su país a que expresen su rechazo al ataque de Israel contra los terroristas del Hamas.

Islam, Antisemitismo y Mentira

por Rubén Kaplan en elreloj.com
La aplastante derrota que infligió el IDF, (la Fuerza de Defensa de Israel) al grupo terrorista Hamas, que se declaró inverosímilmente victorioso, despertó de su letargo, a lo largo y ancho del orbe, al rancio y agazapado antisemitismo.

El Hamas, uno de los epígonos del Islam radical de la Hermandad Musulmana, registra en su acta fundacional llamada Estatuto del Movimiento de Resistencia Islámica, testimonios de su fanatismo, que pareciera, Occidente se empeña en disimular.

Uno de los 36 artículos de su plataforma, el número 13, refleja inequívocamente, lo estéril que es intentar cualquier tipo de diálogo con los ideólogos del odio y la muerte.

Art. 13: Las iniciativas y las así llamadas soluciones pacíficas y conferencias internacionales están en contradicción con los principios del Movimiento de Resistencia Islámica. Abusar de cualquier parte de Palestina es un abuso dirigido contra parte de la religión. El nacionalismo del Movimiento de Resistencia Islámica forma parte de su religión. (…) Conociendo las partes que (las) constituyen (…), sus actitudes pasadas y presentes ante los problemas musulmanes, el Movimiento de Resistencia Islámica no considera estas conferencias capaces de concretar las demandas, restaurar los derechos o brindar justicia a los oprimidos. Estas conferencias son sólo formas de establecer a los infieles en la tierra de los musulmanes como árbitros. (…) No hay solución para la cuestión Palestina sino a través de la Jihad. Todas las iniciativas, propuestas y conferencias internacionales son una pérdida de tiempo (…).

El consabido «A confesión de parte, relevo de pruebas» no hace mella en la izquierda obtusa, veleidosamente «progre» que idealiza románticamente a los terroristas, responsables de atroces crímenes.

La Jihad, que significa «guerra santa» no persigue estrictamente propagar la fe de Mahoma, sino que tiene como último y primordial objetivo, lograr la hegemonía y el dominio musulmán del mundo entero.

Además del Hamas y su mentor, La Hermandad Musulmana, invocan a la Jihad, el tristemente célebre Al Qaeda, cerebro y ejecutor del 9/11, Laskar Jihad, responsable del asesinato de más de 10.000 cristianos en Indonesia; Harakat ul-Jihad-islami, propulsor de la violencia en Chechenia. El Jihad Islámico Palestino, grupo terrorista perpetrador de crueles crímenes contra Israel, el Jihad Islámico Egipcio, rama de la Hermandad Musulmana que asesinó entre otros al presidente egipcio Anuar Sadat en 1981. Otra facción es el sanguinario Jihad Islámico de Yemen, eclipsado por el feroz Jihad de Sudán, que en el transcurso de dos décadas, apoyados por el gobierno, atacan a los no musulmanes, los saquean y matan a los hombres. Integra también la nefasta lista , el Hezbollah, movimiento terrorista acusado por la Justicia argentina del atentado a la AMIA , liderado por el jeque Hassan Nasrallah, que provocó en el 2006, la Segunda Guerra del Líbano con Israel.

Los jihadistas, han esclavizado y violado a decenas de miles de mujeres, a las que obligaron a cambiar de religión, mutilando además sus órganos sexuales.

La transcripción de otro artículo del estatuto del Hamas, demuestra elocuentemente el rol preponderante que le otorga el movimiento terrorista a los medios de comunicación.

Art. 22: Por mucho tiempo, los enemigos han estado planeando (…) para lograr lo que han conseguido. (…) Con su dinero tomaron el control de los medios, las agencias de noticias, la prensa, las editoriales y las estaciones de radio del mundo; (…) incitaron revoluciones en varias partes del mundo, con el propósito de (…) cosechar sus frutos (…); formaron sociedades secretas, como los francmasones, el Rotary Club, los Leones y otras en diferentes partes del mundo, para sabotear las sociedades y lograr los intereses sionistas (…); son capaces de controlar países imperialistas e instigarlos a colonizar muchas naciones para explotar sus recursos y propagar la corrupción. (…) Estuvieron detrás de la Primera Guerra Mundial, con la cual fueron capaces de destruir el califato islámico (…). Obtuvieron la Declaración Balfour y formaron la Liga de las Naciones, a través de la cual pudieron gobernar el mundo. Estuvieron detrás de la Segunda Guerra Mundial, a través de la cual tuvieron grandes ganancias financieras con la venta de armamento y prepararon el camino para el establecimiento de su Estado. Fueron quienes instigaron el reemplazo de la Liga de las Naciones por las Naciones Unidas y el Consejo de Seguridad, que les permiten gobernar el mundo a través de ellos. (…) Las fuerzas imperialistas en el Occidente imperialista y el Este comunista apoyaron al enemigo con todo su poder, con dinero y hombres. (…)

Este artículo 22, está claramente inspirado en Los Protocolos de los Sabios de Sión, el panfleto antisemita que fue publicado en 1903 en la Rusia zarista, para instilar el odio a los judíos y justificar los pogromos. Es notable la analogía con las supuestas reuniones de los «Sabios de Sión» en las que estos, describen los planes de una conspiración judía, en la que estaban involucrados la masonería y los comunistas, a los que los judíos controlaban, con la finalidad de obtener el poder mundial. Estas patrañas antisemitas, verdadero fraude histórico que también utilizó Hitler en su libro Mein Kampf, (Mi Lucha) desacreditadas repetidamente, continúan como miasmas deletéreos, infectando a las sociedades.

En los países islámicos, Los protocolos de los Sabios de Sión, traducidos al árabe se han multiplicado y tienen una enorme difusión en textos académicos, la televisión y en la enseñanza primaria.

The Center for Monitoring the Impact of Peace, (CMIP) examinó 160 manuales escolares y «Libros escolares» publicados por la «moderada» Autoridad Palestina. Los resultados de este estudio, espantan. Muestran que esos textos apuntan a inculcar en la niñez y juventud, el odio a los judíos en general y a Israel en particular, instándoles a ser futuros mártires.

La estrategia terrorista rindió frutos. Una desmesurada, parcial y maniquea cobertura periodística de gran parte de la prensa mundial , condenó a Israel por defenderse de los miles de misiles que lanzó el Hamas sobre su territorio, inmediatamente después de su retirada unilateral, hace más de tres años.

Desproporcionada respuesta, ataques a civiles, especialmente a niños y mujeres, bombardear escuelas y edificios de la ONU, fueron algunas de las imputaciones que se le hicieron al Estado hebreo. Filmaciones e imágenes donde se veían a los terroristas del Hamas, usando niños y civiles como escudos humanos, y usando ambulancias del organismo internacional para huir, disparando desde edificios de la ONU y de mezquitas, fueron convenientemente omitidas por los medios.

En psicoanálisis hay un concepto que se denomina Transferencia.

Sigmund Freud, fue quien primero conceptualizó la transferencia como el vínculo que caracteriza la relación analítica; posteriormente, lo siguió J. Lacan, a través de la instauración de la Fase, Estadio del Espejo, o registros de lo imaginario. Tres son los registros: Real, simbólico e imaginario. Lacan hizo un importante aporte a lo que es formación yoica y la estructuración del sujeto a partir de la relación que se establece entre la identificación y transferencia. En la Planche y Pontalis se encuentra la identificación como un «proceso psicológico mediante el cual un sujeto asimila un aspecto, una propiedad, un atributo de otro y se transforma, total o parcialmente, sobre el modelo de éste».

Es conocida, la alianza que hubo entre Hitler y el Gran Mufti de Jerusalén, Haj Amin Al- Husseini, quien fuera el tío abuelo del terrorista Yasser Arafat , creó en Bosnia durante la Segunda Guerra Mundial, la división de las SS Hanzar, conformada por musulmanes bosnios-nazis. Husseini, que se reunió con Hitler el 21 de noviembre de 1941, fue responsable por incitar la masacre de judíos por parte de los árabes en 1929, al igual que el asesinato de judíos de Farhud en Irak en 1941 y los crímenes contra los serbios cristianos en el este de Europa.

En el Holocausto, el mayor crimen de la historia de la humanidad, que duró desde el 30 de enero de 1933 hasta el 8 de mayo de 1945, fueron exterminados 6 millones de judíos y murieron 5 millones de diferentes religiones, gitanos y grupos minoritarios.

En 1939, la población judía del mundo era de algo más de 16 millones y medio de almas. Después del Holocausto, más de un tercio fue exterminado. Antes de la Segunda Guerra Mundial, el 57% de la población judía residía en Europa, después de ella, sólo permaneció un exiguo 32%.

El Holocausto tiene entre sus mayores negadores al presidente de la República Islámica de Irán, el desequilibrado y peligroso Mahmoud Ahmadinejad, que reitera cada vez que puede, su amenaza de borrar a Israel del mapa. En el país persa, el diario iraní Hamshahri, patrocinado por el Ministerio de Cultura y orientación Islámica de Irán, convocó en el 2006 a caricaturistas de varios países, para satirizar el Holocausto.

El ganador fue un oscuro caricaturista del diario oficialista marroquí, A l Sahara al Magrebia, llamado Abdellah Derkaoui.

En su momento, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Israel reaccionó inmediatamente, a través de su portavoz Mark Regev, lamentando que «el régimen iraní se haya sumado al coro obsceno de los que niegan el Holocausto»

Bueno es recordar, la ira y violencia que suscitaron en los musulmanes las caricaturas del Profeta Mahoma publicadas por el periódico danés Jyllands- Poste.

En Gran Bretaña, que eliminó de los textos de estudios toda referencia al Holocausto para no herir la susceptibilidad de los musulmanes, anuncian la impresión y difusión de los libelos hechos dibujos, burlando el Holocausto.

En una sorprendente transmutación, los palestinos, se sienten víctimas, inventando puerilmente su propio Holocausto. Las cifras siguientes no avalan su disparatada pretensión: El número de palestinos en Judea-Samaria (West- Bank) y Gaza en 1967 era de 1.100 millones. En 2008, sumaban 4.148.000 millones.

La Franja de Gaza fue comparada falazmente con un campo de concentración por el cardenal Renato Martino, presidente del Pontificio Consejo para la Justicia y la Paz del Vaticano, «Poblaciones indefensas son siempre las que pagan. Observen las condiciones en Gaza; más y más, rememoran a un gran campo de concentración».

No recuerdo que se haya pronunciado el cardenal Martino sobre la persecución sistemática y asesinatos que sufren los cristianos de Gaza.

También la periodista inglesa y activista pro-palestina Lauren Booth, cuñada del ex primer Ministro británico Tony Blair, hizo la misma comparación que el clérigo Martino. Una fotografía que la mostraba sonriente en un almacén en Gaza, repleto de comestibles y bebidas, torna absurdo, el lamentable parangón.

En muchos países del mundo se registran manifestaciones y marchas convocadas por organizaciones de izquierda y musulmanes, en repudio del «genocidio» de Israel contra el pueblo palestino. Se exhiben obscenamente banderas de Israel en las que junto a la Estrella de David se divisan las esvásticas nazis.

La infamia de relacionar a Israel, la única democracia de Medio Oriente con el nazismo, verdugo de 6 millones de judíos, sencillamente, asquea. La publicidad islámica, al que un ocurrente denominó Paliwood, que convierte a la víctima en victimario, es el único éxito que puede atribuirse el fundamentalismo radical musulmán, que utiliza la mentira como su arma más poderosa.

Desde ya cuenta con un terreno fértil, para su penetración: El antisemitismo.

En un mundo castigado por una crisis económica y financiera, casi sin precedentes, desempolvar el viejo antisemitismo, en muchos países, es funcional al poder, ya que posibilita distraer a la gente de hechos graves de corrupción y latrocinio que ocurren en sus naciones.

Como dijera Jean Paul Sartre: «Si el judío no existiera, el antisemitismo lo hubiese inventado»

El cinismo del CDDH de la ONU

por Rubén Kaplan en elreloj.com
El Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, en un acto pletórico de hipocresía, aprobó el lunes 12 de enero de 2009 una resolución que condena a Israel por su ofensiva en la franja de Gaza.

El CDDH, es un órgano intergubernamental que actúa como apéndice de las Naciones Unidas. Fue creado por la Asamblea General de la ONU el 15 de marzo de 2006, con el objetivo primordial de considerar las situaciones de violaciones de los derechos humanos y hacer recomendaciones al respecto.

Un año después de celebrar su primera reunión, el 18 de junio de 2007, el Consejo, adoptó su «Paquete de Construcción institucional», que proporcionaría elementos para guiar su accionar futuro. Entre éstos se destaca el nuevo Mecanismo de Examen Periódico Universal, por medio del cual se escudriña la situación de los derechos humanos en los 192 Estados miembros de Las Naciones Unidas. Otra modalidad incluye un nuevo Comité Asesor que sirve como el «think tank» del Consejo, proveyendo a este de asesoramiento en diversas cuestiones inherentes a los derechos humanos y como método de denuncias que posibilita que individuos y organizaciones presenten alegatos sobre violaciones de los derechos humanos y hagan recomendaciones al respecto. Asimismo, el Consejo se compromete a trabajar de cerca con los procedimientos especiales de Las Naciones Unidas, establecidos por la extinta comisión y admitidos por el Consejo.

Todas esas plausibles intenciones, en virtud de la conformación de los países miembros del CDDH, son un enunciado vacuo.

La resolución condenatoria de Israel, que es no vinculante, obtuvo 38 votos a favor, procedentes la mayoría de ellos de países africanos, árabes e islámicos y de los no alineados, trece abstenciones de los países europeos junto a Japón, Corea, Bosnia- Herzegovina, Ucrania y Camerún, un único y honroso voto en contra, (EEUU no integra el Consejo) de Canadá, país que figura en la agenda de Barak Obama como el primer destino a visitar por el mandatario electo de los Estados Unidos, según lo anunció la oficina del Primer Ministro de Canadá y líder del Partido Conservador, Stephen Harper.

El voto en disidencia de Canadá, expresa su queja porque el texto que llama a una retirada inmediata de las Fuerzas de Israel, es equívoco al no reconocer que Israel ha actuado para parar el ataque de cohetes a su territorio por parte de Hamas, que controla Gaza. Alemania, representando a los miembros de la Unión Europea en el Consejo,dijo que ellos se abstuvieron por la misma razón expresada por Canadá.

Muchos de los Estados integrantes del CDDH, Arabia Saudita, Bangladesh, Nigeria, Qatar, Cuba, China, Nigeria, Ghana, Rusia, Malasia, Pakistán, por nombrar algunos de los que condenaron la «operación israelí que ha resultado en violaciones masivas de los derechos humanos del pueblo palestino y en la destrucción sistemática de las infraestructuras «, están sindicados, paradójicamente, de cometer graves crímenes y violaciones a los derechos humanos en sus respectivos países.

El comportamiento descaradamente maniqueo del CDDH, que condena sólo a Israel, mereció la réplica de su Ministerio de Relaciones Exteriores: » La resolución pasa por alto el terrorismo que se está llevando a cabo contra Israel, no menciona a Hamas ni le atribuye responsabilidad por los acontecimientos, ni tampoco el hecho que durante años los ciudadanos israelíes han estado expuestos a fuego de mortero y cohetes lanzados por Hamas y otras organizaciones terroristas, el uso de civiles como escudos humanos por la organización terrorista Hamas, en violación del derecho internacional, y su total falta de voluntad para ayudar al proceso político y los verdaderos intereses de los israelíes y palestinos por igual.

En una verdadera afrenta hacia Israel, la única democracia de Medio Oriente, el organismo de derechos humanos de las Naciones Unidas, cooptado por los intereses islámicos, con su cínica resolución que condena únicamente al Estado hebreo por su incursión defensiva en Gaza, agrega otra mácula a su oprobioso historial.