Graves amenazas a los judíos de Venezuela

Israel Haiom/AJN.- Según reproduce el sitio web de Keren Hayesod, la principal ONG de Israel, un informe producido por el controlador de derechos humanos de la Organización de Estados Americanos advierte de una posible “amenaza a la vida e integridad física de la comunidad judía de Venezuela” debido a las violaciones del régimen chavista a los derechos humanos y políticos de los ciudadanos.
En su sitio web, el Keren Hayesod, principal ONG de Israel, nombra a un extenso informe publicado a fines de febrero en el que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos acusa al gobierno de Venezuela de promover un ambiente de “intolerancia política” y un “clima hostil para el libre ejercicio de

la participación política en disentimiento”.
El informe habla sobre la prevaleciente “inseguridad ciudadana” en el país y se guardó sus más fuertes críticas hacia la “impunidad prevaleciente que afecta casos de violaciones de derechos humanos”, en la que incluye casos de mala conducta policial, abuso de la autoridad y hasta tortura.
Keren Hayesod indica que la información sobre la situación de la comunidad judía llega en parte de fuentes del gobierno venezolano y en parte de grupos judíos con gran preocupación en el tema, como la B’nai B’rith Internacional y la Coalición para Preocupaciones Judías-Amcha, una red de Estados Unidos que defiende y trabaja “en nombre de judíos en riesgo”.
Comenzando en el párrafo 780 del informe, que está disponible en el sitio web de la organización, la comisión expresa “preocupación” sobre “informes que indican que la comunidad judía de Venezuela está siendo especialmente afectada por incidentes violentos”.
El trabajo cita al discurso antisemita en los medios y entre funcionarios del estado, combinados al vandalismo y a persecuciones “no explicadas” por la policía venezolana y concluye que tales incidentes contribuyen a “crear una atmósfera de intimidación y violencia contra la comunidad judía de Venezuela”.
La comisión se comprometió a seguir de cerca los pasos tomados por autoridades venezolanas para “que no se reiteren tales actos violentos contra la comunidad judía en Venezuela y para establecer la verdad sobre los incidentes, además de castigar a los culpables”.

Bolivia lo niega y dice que "sólo se le puede ocurrir a un payaso"

Itongadol.- El ministro de Presidencia centró sus críticas en la «irresponsabilidad» de los medios de comunicación al divulgar ese informe y en la agencia israelí que lo elaboró a la que tachó de «incompetente».El Gobierno de Bolivia negó hoy que venda uranio a Irán, como asegura un informe secreto del Ministerio de Exteriores de Israel, y calificó estas informaciones de una «barbaridad» que «sólo se le puede ocurrir a un payaso».

En conferencia de prensa, el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, defendió que la relación entre Bolivia e Irán es «totalmente transparente» y está dirigida a «proyectos de industrialización» en diversos ámbitos.

«¿A qué despistado se le puede ocurrir que Bolivia está desarrollando tecnología o está promoviendo y cooperando con el desarrollo nuclear de Irán?», preguntó Quintana, al señalar que su país «apenas está empezando a mover la maquinaria de la industria básica».

El ministro de Presidencia centró sus críticas en la «irresponsabilidad» de los medios de comunicación al divulgar ese informe y en la agencia israelí que lo elaboró a la que tachó de «incompetente».

El Gobierno de Evo Morales responde así al informe secreto del Ministerio de Exteriores de Israel difundido por medios de comunicación, que afirma que Bolivia y Venezuela suministran uranio al programa nuclear de Irán.

Bolivia «no produce uranio», según dijo el ministro de Minería, Luis Alberto Echazú a medios locales, aunque su director del sector admitió que en la región oriental de Santa Cruz existe una explotación de tantalita que presenta bajas concentraciones de uranita (óxido de uranio)

En la región andina de Potosí, un responsable de la Prefectura dijo a la prensa que está previsto invertir unos 300.000 dólares en la búsqueda y exploración de uranio en ese departamento, concretamente, en el llamado cerro Cotaje.

Occidente, así como Israel, teme que el régimen de Teherán esté desarrollando armas nucleares, aunque el presidente Mahmud Ahmadineyad asegura que su programa sólo tiene fines pacíficos.

Bolivia rompió relaciones diplomáticas con Israel a principios de año en protesta por la ofensiva militar de este país en la franja de Gaza entre el 27 de diciembre y el 18 de enero pasados.

Bolivia desmiente que suministre uranio a Irán

ItonGadol/AP.- Los integrantes del servicio de inteligencia de Israel son «ineptos, incompetentes y payasos», afirmó el martes el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, en relación con un informe israelí que asegura que Bolivia entrega uranio a Irán.

Un informe secreto del gobierno israelí obtenido el lunes por The Associated Press en Jerusalem dijo que Venezuelay Bolivia suministran uranio para el programa nuclear iraní, considerado una amenaza por Israel.

«La agencia de inteligencia de Israel está sufriendo de severa crisis de capacidad y aptitud. Son ineptos, incompetentes y payasos porque sólo a un payaso se le puede ocurrir semejante barbaridad», dijo a periodistas el ministro Quintana.

Su colega de Minería, Luis Alberto Echazú, afirmó que «Bolivia no produce uranio» aunque señaló que hay indicios de reservas del mineral en suelo boliviano.


«No hay un relevamiento geológico preciso sobre yacimientos de uranio y mucho menos se puede hablar de exportación», dijo Echazú.

A su vez, el director de Minería, Freddy Beltrán, explicó que Bolivia tiene reservas de uranio que no son explotadas. Agregó que su país exporta tantalita, un mineral que contiene cantidades pequeñas de óxido de uranio.

«Bolivia no produce uranio, no explota, claro, hay uranio», dijo en declaraciones al diario La Razón publicadas el martes.

El presidente Evo Morales estableció relaciones en septiembre de 2007 con Irán cuyo presidente Mahmud Ahmadinejad visitó Bolivia y comprometió un amplio plan de cooperación a este país por 1.100 millones de dólares.

La semana pasada llegaron a La Paz legisladores de esa nación para estrechar vínculos con sus colegas bolivianos.

El ingeniero Carlos Colque, secretario de Minería de la gobernación de Potosí en el sur, dijo a la emisora Fides el martes que recién iniciará un proyecto de exploración de uranio en esa región andina con un presupuesto de 286.000 dólares. «Recién estamos iniciando trabajos de prospección», dijo.

A finales de marzo, visitó Bolivia el presidente del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) Mohamed ElBaradei, quien declaró, tras entrevistarse con Morales, que su organización ayudará a Bolivia a explorar yacimientos de uranio con fines pacíficos.

Morales rompió relaciones con Israel a finales de enero por la ofensiva militar israelí a Gaza.

Peres califica de indignante y vergonzoso el informe de la ONU

El presidente de Israel, Shimón Peres, calificó hoy de «indignante» el informe de la ONU que atribuye a la «negligencia e imprudencia» del Ejército israelí por el bombardeo de instalaciones del organismo mundial en Gaza durante el operativo militar israelí contra Hamás de diciembre y enero pasados.

«Consideramos que es vergonzoso. No lo aceptaremos nunca, y no pediremos perdón porque tenemos derecho de defender la vida de nuestros hijos y mujeres», dijo el mandatario israelí en un encuentro con la prensa tras una reunión con el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon.

Peres aseguró visiblemente enojado que Israel no aceptará “ni una palabra” del informe elaborado por una comisión de Naciones Unidas, en el que según confirma la responsabilidad del Ejército israelí al bombardear seis instalaciones de la ONU.

El documento de la ONU atribuye los ataques a la «negligencia e imprudencia» de los militares israelíes y niega que los inmuebles bombardeados fueran empleados por el movimiento radical islámico Hamás.

Peres admitió que posiblemente pudieron haber cometido errores, pero negó categóricamente que las propiedades de la ONU se hubieran bombardeado intencionadamente y aseguró que el Gobierno israelí considera la posibilidad de pagar reparaciones a la organización por esos daños, que el informe valora en unos 10,5 millones de dólares.